Queridos hijos, cuidad de vuestra vida espiritual. Sois importantes para la realización de los planes de Dios y Él espera mucho de vosotros. No viváis lejos de la gracia del Señor. He aquí el tiempo adecuado para vuestro regreso a Aquél que es vuestro único, Camino,Verdad y Vida. Dad lo mejor de vosotros a la misión que os fue confiada. Haced el bien a todos. No os quedéis apegados a las cosas materiales.Aferrense a las cosas del cielo para ser salvados. Alejaros de todo lo que os distancia del Señor. Yo soy vuestra Madre y vine del cielo para conduciros a la santidad. Llegará un día en que pocos serán los hombres y mujeres que permanecerán en la verdad. Ideologías falsas atraerán un gran número de personas. Incluso aquellos que son fervorosos en la fe serán indiferente. Estad atentos. No permitáis que el demonio os aleje de la verdad. Habrá en la tierra un tiempo de gran apostasía y que se opone a Cristo engañará a muchos. Doblad vuestras rodillas en oración. Después de toda la tribulación de la victoria del Señor vendrá para los justos. Coraje. Este es el mensaje que hoy os transmito en nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberme permitido reuniros aquí una vez más. Os bendigo en el nombre del Padre y del Espíritu Santo del Hijo. Amén. Quedad en paz.